25 SECRETOS PARA LA BATALLA ESPIRITUAL

Conoce los secretos que Jesús reveló a Santa Faustina para combatir espiritualmente contra el mal

1- Nunca confíes en ti mismo sino abandónate totalmente a Mi voluntad.

La confianza es un arma espiritual.

La confianza es parte del escudo de la fe que San Pablo menciona en el capítulo 6 de Efesios: es la armadura de Dios.

El abandono a la voluntad de Dios es un acto de confianza; la fe en acción disipa los espíritus malignos.

2- En la desolación, en la oscuridad y en las diversas dudas, recurre a Mí y a tu director espiritual. Él siempre te responderá en mi nombre.

En tiempos de guerra espiritual, orar inmediatamente a Jesús.

Invocar Su Santo Nombre porque es temido en el infierno. Lleva la oscuridad a la luz diciéndole a un director espiritual o confesor lo que te sucede y sigue sus instrucciones.

3- No negocies con ninguna tentación; enciérrate inmediatamente en Mi Corazón.

En el Jardín del Edén, Eva negoció con el diablo y perdió.

Tenemos que recurrir al refugio del Sagrado Corazón.

Al correr hacia Cristo, damos la espalda al demonio.

4- En la primera oportunidad que tengas, revela la tentación que sufres a tu confesor.

Una buena confesión, un buen confesor y un buen penitente son la receta perfecta para la victoria sobre la tentación y la opresión demoníaca, esto no falla!.

5-Pon tu amor propio en el último lugar, para que no perjudique tus acciones.

El amor propio es natural, pero debe ser ordenado, libre de orgullo.

La humildad derrota al diablo que es el orgullo perfecto. Satanás nos tienta al desordenado amor propio para llevarnos a su piscina de orgullo.

6- Ten mucha paciencia contigo mismo

La paciencia es un arma secreta que nos ayuda a mantener la paz del alma incluso en las grandes tormentas de la vida.

Tener paciencia con uno mismo es parte de la humildad y la confianza. El diablo nos tienta a la impaciencia, a volvernos contra nosotros mismos para que nos enojemos. Mírate e ti mismo desde la visión de Dios que es infinitamente paciente.

7- No descuides las mortificaciones interiores.

La Escritura enseña que algunos demonios sólo pueden ser desalojados por la oración y el ayuno.

Las mortificaciones interiores son armas de guerra. Pueden ser pequeños sacrificios ofrecidos con gran amor. El poder del amor sacrificial expulsa al enemigo.

8- Siempre obedece a Dios y a tus superiores.

Cristo está hablando a Santa Faustina que vive en un convento. Pero todos tenemos autoridad sobre nosotros.

El diablo pretende dividir y conquistar. La humilde obediencia a la autoridad auténtica es un arma espiritual.

9- Evita las murmuraciones 

La lengua es un arma poderosa que puede hacer un gran daño.

Murmurar, chismear, nunca es de Dios. El diablo es un mentiroso que despierta falsas acusaciones y chismes que pueden matar la reputación de una persona. No murmures nunca!

10- Que todos actúen como quieran. Tu actúa, como yo quiero que lo hagas.

La mente de uno mismo es clave en el combate espiritual.

El diablo es un entrometido que intenta arrastrar a todo el mundo.

Agrada a Dios y deja que los demás opinen y hagan lo que quieran.

11- Observa la regla tan fielmente como puedas.

Jesús se refiere a las reglas de una orden religiosa.

La mayoría de nosotros hemos hecho algún voto ante Dios y de la Iglesia y debemos ser fieles a nuestras promesas, es decir, votos matrimoniales y votos bautismales.

Satanás te tienta para llevarte a la infidelidad, a la anarquía y a la desobediencia. La fidelidad es un arma para la victoria.

12- Si alguien te causa problemas, piensa en lo bueno que puedes hacer por esa persona que te hizo sufrir.

Ser un recipiente de la misericordia divina es un arma para el bien y para derrotar al mal.

El diablo trabaja con el odio, la ira, la venganza y la falta de perdón.

Siempre alguien nos ha herido a en algún momento.

¿Qué bien podemos hacer a cambio? Devolver una bendición rompe maldiciones.

13- No descargues tus sentimientos.

Un alma habladora será más fácilmente atacada por el diablo.

Presenta tus sentimientos sólo al Señor.

Recuerda que los espíritus buenos y malos escuchan lo que dices en voz alta. Los sentimientos son pasajeros. La verdad es la brújula. El recogimiento interior es una armadura espiritual.

14- Haz silencio cuando seas reprendido.

La mayoría de nosotros hemos sido reprendidos en algún momento.

No tenemos control sobre eso, pero podemos controlar nuestra respuesta. La necesidad de estar en lo correcto todo el tiempo puede conducir a las trampas demoníacas.

Dios conoce la verdad. Déjalo ir.

El silencio es una protección. El diablo puede usar la justicia propia para hacernos tropezar también.

15- No preguntes la opinión de todos, sino sólo la opinión de tu confesor; sé tan sincero y sencillo como un niño con él.

La simplicidad de la vida puede expulsar a los demonios.

La honestidad es un arma para derrotar a Satanás, el gran Mentiroso.

Cuando mentimos ponemos un pie en su campamento e intentará seducirnos aún más.

16- No te desanimes por la ingratitud.

Cuando nos encontramos con la ingratitud o la insensibilidad, el espíritu de desánimo puede pesarnos.

Resiste todo el desánimo porque nunca es de Dios. Es una de las tentaciones más efectivas del diablo.

La gratitud en todas las cosas gana el día.

17- No examines con curiosidad los caminos por los que te conduzo.

La necesidad de conocer y la curiosidad sobre el futuro es una tentación que ha llevado a demasiadas personas a entrar en contacto con psíquicos, brujas, etc.

Elige caminar en la fe. Decide confiar en Dios que te guía en el camino hacia el cielo.

Resistir el espíritu de la curiosidad siempre.

18- Cuando el aburrimiento y el desánimo golpeen tu corazón, huye de ti mismo y escóndete en Mi corazón.

Jesús entrega el mismo mensaje una segunda vez. Ahora se refiere al aburrimiento.

Anteriormente en el Diario le dijo a Santa Faustina que el diablo más fácilmente tienta a las almas ociosas.

Cuidado con el aburrimiento, el espíritu de letargo, o la acedia.

Las almas ociosas son presa fácil para los demonios.

19- No temas la lucha; el coraje a menudo intimida las tentaciones, y no se atreven a atacarnos.

El miedo es la segunda táctica más común del diablo (el orgullo es el primero).

El valor intimida al diablo; él huirá ante el coraje perseverante que está sobre Jesús, la roca. Todas las persona luchan, pero Dios es nuestra fortaleza.

20- Siempre lucha con la profunda convicción de que estoy contigo.

Jesús instruye a Santa Faustina a «luchar» con convicción.

Ella puede hacerlo porque Cristo la acompaña. Los cristianos estamos  llamados a luchar con convicción contra todas las tácticas demoníacas.

El diablo trata de aterrorizar a las almas, el terrorismo demoníaco –¡Resiste!

Invoca al Espíritu Santo durante todo el día.

21- No te guíes por el sentimiento, porque no siempre está bajo tu control; todo el mérito está en la voluntad.

Todo el mérito está en la voluntad porque el amor es un acto de la voluntad.

Somos completamente libres en Cristo. Debemos tomar una decisión, una decisión para bien o para mal. ¿En qué campamento vivimos?

22-Siempre depende de tus superiores, incluso en las cosas más pequeñas.

Cristo está instruyendo a una religiosa aquí.

Pero, todos tenemos al Señor como nuestro Superior. La dependencia de Dios es un arma de guerra espiritual porque no podemos ganar por nuestra cuenta.

Proclamar la victoria de Cristo sobre el mal es parte del discipulado intencional. Cristo vino a vencer a la muerte y al mal. ¡Proclámalo!

23- No te engañes con perspectivas de paz y consolaciones; por el contrario, prepárate para grandes batallas.

Santa Faustina sufrió físicamente y espiritualmente.

Estaba preparada para grandes batallas por la gracia de Dios que la sostenía. Cristo claramente nos instruye en las Escrituras para estar preparados para grandes batallas, para ponerse la armadura de Dios y resistir al diablo.

Sé vigilante y astuto siempre.

24- Comprende que estás en una gran etapa donde todo el cielo y la tierra te están mirando.

Estamos todos en un gran escenario donde el cielo y la tierra están mirando.

¿Qué mensaje damos con nuestra vida?

¿Qué irradiamos  luz, oscuridad o grises?

La forma en que vivimos atrae más luz o más oscuridad?

El diablo si no logra llevarnos a la oscuridad,  trata de mantenernos en la categoría de tibios, lo cual no es agradable a Dios.

25- Lucha como un caballero, para poder recompensarte. No seas demasiado temeroso, porque no estás solo.

Las palabras del Señor a Santa Faustina pueden convertirse en fuerza: ¡Lucha como un caballero!

Un caballero de Cristo sabe bien la causa por la que él lucha, la nobleza de su misión, el Rey a quien sirve, y con aplomo lucha hasta el final, incluso a costa de su vida

Si una monja polaca joven, sin educación y sencilla, unida a Cristo, puede luchar como un caballero, todo cristiano puede hacer lo mismo. La confianza es victoriosa.