ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS
En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Amén.
Señor de los Milagros, te damos gracias porque a una indiecita en los comienzos de nuestra historia latinoamericana la hiciste instrumento de tus maravillas.
Aquella mujer nos recordó que más importaba la libertad de un hombre, que la posesión de una imagen.
Suscita en nosotros el recuerdo de esta lección evangélica siempre que nos postremos ante ti, Señor de los Milagros, para pedirte un favor o agradecerte un beneficio.
Acrecienta nuestra fe en tu presencia, que se manifiesta de diversos modos, ya te adoremos en la Eucaristía, ya te consideremos en el Pesebre, o cuando nos postremos ante tu Cruz o te veamos en nuestros hermanos, especialmente en los que sufren y en los que luchan por el logro de sus aspiraciones hacia una vida más digna del ser humano.
Bendícenos, misericordioso, a todos, e inspíranos deseos sinceros de una vida más cristiana y más entregada al servicio de nuestros hermanos. Amén.
Puedes leer también aquí:
.La poderosa oración al Señor de los Milagros
ORACION DEL PRIMER DIA:
Padre de bondad, en nombre de tu Hijo Jesús renuncio a todo pecado, renuncio al maligno y a todas sus seducciones, a sus mentiras y engaños. Renuncio a la idolatría del placer, del poder o del tener.
Renuncio a mi resentimiento y a mi rencor. En Cristo Jesús me has hecho hijo tuyo; libérame de todas las heridas provocadas por el desamor y que me impiden amarte.
Tú eres mi Señor en la salud y en la enfermedad, en el éxito y en el fracaso, en las alegrías y en las tristezas, en la vida y en la muerte, en el presente y en la eternidad.
Jesús, tú viniste por los enfermos y los pecadores. Por eso, me vuelvo hacia ti y quiero pedirte que sanes mi alma y mi cuerpo.
Tú sabes, Jesús, que el pecado destroza y desgarra la integridad del ser humano, que destruye las relaciones entre las personas y nuestra amistad contigo. Pero no existe pecado ni enfermedad que tú no puedas curar con tu palabra omnipotente.
Tú eres el Dios con nosotros; te pido que transformes mi vida.
María, madre del amor hermoso, eres tú quien mejor conoce a Jesús; ayúdame a hacer a un lado todo lo que obstaculiza mi encuentro con Él.
María, alcánzame la gracia de que la Palabra de tu Hijo me conmueva, de que su amor me transforme y de que su perdón me haga capaz de perdonar.
María, Madre del Redentor, ora conmigo para que pueda obtener la gracia de la sanación, no sólo para mí, sino también para aquellos por quienes deseo interceder ante el Señor.
REZAR: Padre Nuestro, Ave María y Gloria al Padre…
JACULATORIA: Dios mío, transforma mi corazón, haz que sea semejante al tuyo!
PARA TERMINAR REZAMOS LOS GOZOS AL SEÑOR DE LOS MILAGROS
Milagroso, buen Jesús, sálvenos tu santa Cruz.
Bondadoso, buen Jesús, eres Vida, Gozo y Luz.
Para salvar tus corderos te llamaste Buen Pastor,
y con ese inmenso amor cruzaste nuestros senderos,
Dios y hombre verdadero, nuestro guía y nuestra luz.
El Reino fue tu programa, la justicia y la hermandad,
la paz y la caridad que un nuevo mundo proclama
y que el corazón inflama, Peregrino de Emaús.
Admirable caridad de una indígena sencilla,
que te obliga ¡oh maravilla! a volver
una vez más para mostrar tu bondad, amable y dulce Jesús.
Tras la noche más oscura se hace el mundo luminoso,
porque el Cristo Milagroso –como un astro de luz pura–
sobre los pueblos fulgura desde el árbol de la cruz.
Multiplicas los portentos como en tu vida terrena,
cambias en gozo las penas y en gracia los sufrimientos,
a los tristes das contento y pan a la multitud.
Vamos haciendo camino entre gozos y dolor.
Mira al pueblo en aflicción, Samaritano divino,
y que tu aceite y tu vino hagan fecunda la cruz.
Oh Profeta de la vida, pregonero de la paz,
concédenos superar la violencia fratricida. Cambia,
Señor, las heridas en justicia y rectitud.
CONSAGRACION AL SEÑOR DE LOS MILAGROS
Señor de los Milagros, porque te amo, he venido a visitarte para alabarte, bendecirte y darte gracias por tantos favores como me has concedido.
Señor de los Milagros, porque te amo, me arrepiento de todos los pecados que he cometido y con los cuales te he crucificado de nuevo en mi corazón; te prometo comenzar desde hoy una vida nueva.
Señor de los Milagros, porque te amo, quiero verte presente en cada uno de mis hermanos.
Señor de los Milagros, porque te amo, he venido a suplicarte como el leproso del evangelio: «Señor, si quieres, puedes curarme» (Mc 1,40). Cúrame, Señor, de la enfermedad del pecado y de las demás enfermedades que me hacen sufrir.
Señor de los Milagros, porque te amo, me consagro a tu servicio con mi familia, con mis seres queridos, con mis trabajos, problemas y alegrías.
Señor de los Milagros, porque te amo, quiero vivir siempre contigo durante la vida para vivir siempre contigo en el cielo.
Oh María, Madre del Perpetuo Socorro, presenta tú misma esta consagración a tu divino Hijo.
Amén.
Encuentra el Triduo completo aquí:
.Primer dia del Triduo al Señor de los Milagros
.Segundo día del Triduo al Señor de los Milagros
.Tercer día del Triduo al Señor de los Milagros
Le he ofrecido al Sr de los Milagros ser su devoto y que mis hijos sean sus devotos y que los ayudes en lo que te estoy pidiendo bendice a mis hijo hijas nietos nietas y bisnietos y que nos concedas lo que necesitamos y la Libertad de Nuestra Venezuela y todos los Venezolanos A M E N
Querido Señor de los Milagros te pido por toda mi familia pero mas te pido por los que se quedaron sin trabajo mis hijos hay 1 QUE HOY NO PUEDE PAGAR EL ALQUILER DONDE VIVE CON SUS SU PAREJA Y SUS 3 NENAS TE LO SUPLICO DESATA TODA TRABA DEL PAGO DEL ANSES para poder seguir al quilando asta que consiga trabajo y por todos los demas Señor lleguen haser fieles seguidore de ti te lo suplico tu que vives y reina por lo siglos de los siglo AMEN AMEN AMEN